El Barça visita este miércoles (19 horas) el estadio del Salzburgo y no le hará falta venir con Leo Messi, aún pendiente de oficializar su continuidad en el club azulgrana, para provocar el primer lleno desde febrero de 2020 en el campo del Red Bull.  “Nos complace saber que después de aproximadamente un año y medio, contra el Eintracht Frankfurt en febrero de 2020, volveremos a tener el estadio lleno”, avanzó el director general del Red Bull Stephan Reiter. Para el Barça será una experiencia inédita desde que la pandemia se instaló en la vida de todos; jugar en un estadio lleno. 

Serán 29.520 espectadores que quieren ver de cerca a Memphis Depay, Antoine Griezmann e incluso a Yusuf Demir, el talento austríaco de 18 años que el Rapid de Viena cedió al Barça esta temporada y que está encandilando al técnico Ronald Koeman. Lógicamente, en Austria, incluso en Salzburgo pese a que Demir proceda de un rival directo vienés, la promesa tiene tirón. Tanto, que la prensa local se atreve a decir osadamente que “Lionel Messi podría volver a estar representado por Demir”. El resultado de la combinación Barça+cracks+Demir fue que todas las entradas volaron en un día en Wals-Siezenheim. 

En el RB Arena de Saalzburgo la reciente visita del campeón de la Liga española, el Atlético de Madrid, atrajo ‘sólo’ a 20.000 aficionados, casi 10.000 menos que los que verán al Barça. Lo harán con la ilusión de que su equipo, vigente campeón y líder de la Liga austriaca con dos victorias en dos partidos y diez goles a favor por sólo dos en contra, repita el triunfo cosechado ante los colchoneros: 1-0. El Barça, por contra, irá a por su ‘cuatro de cuatro’ en la actual pretemporada, tras derrotar a Nàstic, Girona y Stuttgart.