Estudios, investigaciones, cónclaves científicos… y la calle real y concisa. Todo afirma que la bisexualidad va en aumento y que las mujeres son quienes más la abrazan. El número de mujeres jóvenes que se identifican como bisexuales parece que ha aumentado mucho durante los últimos años y, según estos datos, es más habitual que una mujer se identifique como bisexual que como lesbiana. En el caso de los varones, también la tendencia va en aumento, pero las cifras no son tan ilustrativas por un motivo aparente: el machismo hace que muchos bisexuales no lo reconozcan o se asuman como tales.

Las razones para el aumento de esta realidad son muchas. Lo primero para explicarlo puede ser que, según afirman los estudios, mujeres tienen una concepción más fluida de las relaciones que los hombres, por lo que es más probable que se consideren bisexuales, aunque se sientan más atraídas por uno u otro sexo. El incremento del reconocimiento de la fluidez sexual y la creciente fuerza de los movimientos transexuales, son otras realidades que explican que los milennials y la Gen Z sean más propensas a identificarse sin temor como bisexuales. También es un hecho que, cuando Angelina Jolie o Cara Delevigne se asumieron como bi’s, el tema comenzó a dejar de ser un tabú.

Biológicamente se ha demostrado que las mujeres experimentan excitación sexual con imágenes tanto heterosexuales como homosexuales, sin embargo, los hombres que se identifican como estrictamente heterosexuales no muestran casi ninguna excitación por imágenes sexuales que no sean de carácter heterosexual. Esto indica que la bisexualidad se presenta de forma más frecuente en las mujeres que en los hombres.

Satoshi Kanazawa, psicólogo especialista en sexualidad humana, ha afirmado que “la persona por la que una mujer se ve atraída depende mucho de esa posible pareja en cuestión, su estatus reproductivo y otras circunstancias, más que de su género”. Eso explica que las mujeres tiendan a oscilar entre la heterosexualidad, la homosexualidad y la bisexualidad de forma menos complicada que los hombres, lo que hace que sean más realistas, fluidas… y valientes.